Manantial de leche fluye al norte de Nicaragua

Matiguás, Matagalpa

A eso de las cuatro de la mañana – cuando el cielo no ha vislumbrado siquiera el primer rayo de sol- incansable, juicioso y con las pilas puestas, don Noel Gallego, de la comarca Varsovia, socio de la cooperativa lechera Nicacentro, se levanta para dar rienda suelta a las capacidades de buenas prácticas pecuarias que desarrolló en las escuelas del proyecto Ganasol5.

“Cuando se dio la primera reunión nos preguntaron cómo trabajábamos como productores en el manejo de la finca y el ganado. Nosotros nos sentíamos supuestamente buenos ganaderos, trabajábamos según nuestra propia experiencia. Eso no era lo suficiente para manejar la finca en buenas condiciones, entonces comenzaron a capacitarnos a través de escuelas de campo para que pudiéramos salir adelante y me gustó la forma en la que el proyecto buscaba ayudar al productor’’, comentó Gallego.

Ganasol5 fue un proyecto liderado por el CIAT y ejecutado en conjunto con el Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE), el Centro de Importaciones y Exportaciones de Nicaragua (CEI) y HEIFER Internacional. El proyecto fue financiado a través del Programa de Apoyo a Productores (FSP por sus siglas en inglés) que implementa la organización internacional Solidaridad.

Se trabajó mediante la metodología de escuelas de campo o ECAs, donde se compartió conocimientos con más de 500 productores, socios y afiliados de la cooperativa Nicacentro.

Con un total de doce temas relacionados a buenas prácticas de manejo de suelos, ganado, protección de bosques y fuentes de agua, se instruyó a los productores de la zona para que pudieran desarrollar nuevas capacidades para el manejo e implementación de sistemas de ganadería sostenibles, con mayor capacidad de adaptación y mitigación ante el cambio climático.

Proceso de conformación de ECA’s en Matiguás

La Cooperativa Nicacentro, conformada por once centros de acopio, fue el socio local del proyecto. Una de sus tareas consistió en identificar a los agricultores  y zonas donde se requería de mayor formación técnica pecuaria y que fueran de menor índice de ingresos económicos.

Luego se seleccionaron a los productores de cada uno de los centros de acopio para que recibieran el fortalecimiento de conocimientos y herramientas a través de las ECAs. Cada centro de acopio de la cooperativa contó con el acompañamiento de un técnico, encargado de organizar y dirigir a los grupos de productores una vez al mes para discutir los distintos temas de la currícula del proyecto.

“Al iniciar los talleres implementamos la metodología ‘Aprender haciendo’: 80% práctica y 20% teoría. Eso nos sirvió para que los productores adquirieran nuevas habilidades y técnicas al momento del manejo de las fincas’’, así lo asegura Yasser Bolaños Alvarado, ingeniero agrónomo de HEIFER y técnico de unas de las escuelas de campo en Varsovia, Matiguás.

Por su parte, Bismarck Cardoza, médico veterinario y miembro del equipo técnico del proyecto que facilitó las ECA´s añadió que “teníamos guiones para cada tema y luego hacíamos entre nosotros prácticas previas para así compartir el conocimiento con los productores’’.

Ganado vive más sano y produce más leche

El proyecto se desarrolló entre mayo de 2014 y finalizó en diciembre de 2016. Se logró mejorar los ingresos de un total de 1.482 familias, sobre cumpliendo la meta de alcance original de mil familias de la zona.

Para respaldar los resultados obtenidos de la experiencia del proyecto Ganasol5 se creó el documento “Sistematización del fomento tecnológico de ganadería sostenible con la metodología de escuelas de campo en el contexto de la cooperativa Nicacentro Ganasol5’’ (2016).

En él se vio reflejado que el 90% de los productores que participaron en el proyecto pusieron en práctica los conocimientos y tecnologías propuestas en las capacitaciones de las ECAs.

Martín Mena, investigador de CIAT del área de forrajes, aseguró que con las intervenciones de las escuelas de campo se logró mostrar a los productores el potencial que tenían los sistemas de ganadería sostenible, utilizando árboles y pasturas mejoradas.

Por su parte, Milton Castillo, director nacional de HEIFER International, añadió que “el resultado más visible del proyecto fue el relacionado con el intercambio de información y conocimientos relevantes para los grupos beneficiarios y sus organizaciones. Esto tuvo como efecto el incremento en la producción y la calidad de la leche, la mejora en el manejo de la sanidad del ganado y el ordenamiento y aprovechamiento de los recursos existentes en las fincas’’.

En el mismo estudio se logró evidenciar con datos, el impacto que el proyecto tuvo en los incrementos de la producción y la calidad de la leche en el sector.

“Hoy en día con el uso de pastos mejorados se ha logrado clasificar la mayoría de la leche tipo A. Ahora mi meta es invertir menos y producir más’’, agregó Noel.

‘’Actualmente se está en conversación con Nicacentro y otros actores en la zona para proponer y gestionar recursos financieros para ampliar esta experiencia a una mayor cantidad de pequeños productores. “Queremos sumarle los componentes de desarrollo empresarial para mejorar el acceso a mercados de la producción láctea y la de carne, además, de facilitar un ecosistema emprendedor de la pequeña ganadería en todo este territorio’’, comentó Milton Castillo, de HEIFER International.

El coordinador técnico del componente de ganadería sostenible del CIAT del proyecto Ganasol5, Marlon López asegura que ‘’ésta experiencia que hemos tenido en la  zona central de Nicaragua, ahora la vamos a replicar en otro proyecto que tenemos en el atlántico con enfoque de manejo de paisaje abordando 3 de los rubros más importantes: ganadería, cacao y palma. Nosotros como CIAT trabajaremos en la parte de ganadería sostenible’’.

También agrega que aunque se han hecho propuestas para darle seguimiento al proyecto Ganasol5, debido a su gran potencial demostrado a través del impacto generado en el incremento  de la producción y calidad de la leche y los ingresos económicos de los productores involucrados; aún no existen los fondos necesarios para financiar una secuela para dicho proyecto.