Fortalecimiento de capacidades para el control de plagas y enfermedades en los cultivos

Esta iniciativa fue  realizada en CIAT y coordinada por la investigadora María Isabel Gómez del laboratorio de Entomología del CIAT, como parte del trabajo colaborativo del Programa de Investigación de CGIAR en Raíces, Tubérculos y Plátano (RTB, por sus siglas en inglés), y tuvo como propósito capacitar a los investigadores en nuevas herramientas útiles en la predicción y evaluación del riesgo de plagas y enfermedades transmitidas por insectos, que les sirvan para complementar los trabajos de investigación que actualmente realizan en esta área, bajo dirección de los Drs. Wilmer J. Cuellar (CIAT) y Jan Kreuze (CIP).

Durante el curso, los participantes aprendieron sobre el programa ILCYM, un software de libre acceso creado por el CIP, que permite hacer modelos de fenología de plagas para conocer cómo se desarrollan las poblaciones bajo diferentes condiciones de temperatura y así generar mapas de distribución y de riesgo de estas plagas. “Para controlar efectivamente las plagas, se necesita conocer cuándo y dónde pueden generar problemas y para esto son útiles programas como ILCYM”, puntualizó María Isabel Gómez.

“El curso representó una gran oportunidad para aprender e interactuar con los investigadores del CIP, quienes con gran experiencia desarrollaron un curso muy didáctico y de gran aplicación. Estuvieron muy pendientes de resolver nuestras inquietudes y  compartieron con nosotros su conocimiento, experiencia y los avances en el software ILCYM de manera práctica y de gran aplicación en estudios de vectores de virus que es mi área de trabajo”, puntualizó Isabel Moreno Cabrera, investigador Ph.D. en Corpoica.

Por su parte, Marc Sporleder, instructor del curso, manifestó que “el CIP desarrolló el software ILCYM, que facilita el desarrollo de modelos fenológicos con base en datos experimentales específicos de temperatura controlada. Esta herramienta proporciona un conjunto de funciones que describen el efecto de la temperatura sobre el desarrollo, la mortalidad inmadura, la senescencia adulta y la reproducción, compilándolos en un modelo general que determine el rango en el cual la plaga podría establecerse y predecir el potencial de crecimiento de la población. Además, sirve para validar índices de riesgo según datos de temperatura reales o interpolados”.

Así mismo, Heidy Gamarra, investigadora del CIP, agregó que “capacitar a investigadores en relación con plagas y enfermedades, tanto del CIAT como otras organizaciones, es muy importante ya que esta herramienta les va a facilitar comprender mejor los actuales y futuros incrementos de infestaciones de plagas así como de enfermedades.” Por ejemplo, esta herramienta ayudará a instituciones nacionales como el  ICA a obtener información sobre los futuros riesgos de plagas con relación a los cambios climáticos.

De igual manera, se espera que los asistentes a este entrenamiento tengan ahora la capacidad de diseñar experimentos para obtener tablas de vida de insectos plaga y enemigos naturales, modelar variables que afectan su crecimiento poblacional, así como porcentajes de transmisión de virus y otros patógenos. También, obtener predicciones espaciales actuales y para escenarios futuros acerca del riesgo de plagas y el riesgo de diseminación de un patógeno por parte de algún vector, bajo cambios de temperatura a nivel local y global.

El CIAT seguirá a la vanguardia en la organización de cursos que aporten a los investigadores que trabajan en el control de las plagas y enfermedades de los cultivos, y continuará fortaleciendo la alianza que existe con el Programa RTB entre el CIAT y el CIP.