Guy Henry: Una voluntad de pedernal

A partir de 2014, este y otros temas más específicos, como políticas alimentarias urbanas, consumo urbano y vínculos rural-urbanos –un legado, en parte, de sus colegas del CIRAD, al que Guy ha estado vinculado desde 1996 y del que hoy es representante para Colombia, Perú, Ecuador y Venezuela– fueron empujados con ahínco por este holandés, adoptado por segunda vez en su vida por la ciudad de Cali.

Con más empeño y conciencia que muchos hijos naturales de esta ciudad, se propuso empezar a ordenar ‘la casa’ en términos de seguridad alimentaria, y lo logró. Hoy el CIAT es coautor de la nueva política alimentaria nutricional de Cali, que está lista para ser votada por el Concejo Municipal, y la ciudad cuenta con una plataforma académica de seguridad alimentaria y nutricional para apoyar la implementación de esta política a través del diálogo científico y la innovación. ¿Siguiente paso? La ciudad de Palmira, casa del CIAT y vecina de Cali, donde su equipo ya inició un camino orientado a la replicación.

Pero, ¿de dónde vino el compromiso de Guy con Cali?… ¿Su naturaleza de ciudadano ejemplar? ¿Sus apuestas científicas? ¿Sus apuestas estratégicas? ¿Todas las anteriores?… Puede ser… Pero en razón de la verdad, hay que decir que la conexión de Guy con esta Ciudad va más allá de la razón. Aquí conoció a su esposa, Gloria Arboleda: colombiana, paisa, arquitecta, fotógrafa, pintora y escultora; quien fue directora por 5 años del Jardín Botánico de Cali. Basta ver las chispas que saltan de los ojos de Guy cuando ve la foto de su matrimonio, para entender que ella, sin duda, ha sido determinante en el desarrollo de su historia.

Una historia que en Colombia se remonta a 1988, año en el que Guy llegó por primera vez al CIAT (al mismo tiempo que Joe Tohme y Gérard Chuzel) para hacer una investigación posdoctoral en el Programa de Fríjol: se volvió experto en habichuela mientras dirigía un estudio de viabilidad en ella; así como se volvió experto en caballos mientras cultivaba su afición por ellos. Fue líder del grupo de socioeoconomía del Programa de Yuca, hasta la crisis del 95, cuando decidió irse a trabajar a Francia con el CIRAD y se casó con Gloria.

Una época de oro para Guy, en la que nacieron sus dos hijos: Philippe y Bárbara. Trabajó en el Cono Sur (6 años desde Brasil y 7 desde Argentina) y fue responsable de la coordinación de distintos proyectos de investigación en políticas birregionales de la Unión Europea con América Latina, así como de empezar a impulsar el tema de la Bioeconomía a través de plataformas (birregionales también) de cooperación científica y tecnológica como ALCUE Net. En estos años, también fue el experto regional de la Cooperación Francesa en la zona.

El tema de la Bioeconomía es, de hecho, otra de las antorchas que Guy deja encendidas en el CIAT. En abril del 2017 organizó en Bogotá un Foro Nacional de Bioeconomía, un paso importante hacia el posicionamiento de este importante tema en la agenda nacional y un llamado a la creación de un marco político que propicie la inversión y el desarrollo de la bioeconomía como herramienta indispensable para el uso sostenible de los recursos biológicos y el aprovechamiento de los desechos que se generan en su transformación, producción y consumo… en pocas palabras: como motor de desarrollo integral para Colombia.

Además, Guy es punto de referencia y consulta en este tema para actores nacionales como Colciencias, el Departamento Nacional de Planeación (DNP) y la Universidad Tecnológica de Pereira, que acaba de hacerle una invitación para acompañarla junto a sus socios de los sectores público y privado, en la formulación de una bioeconomía para Risaralda, el próximo 8 de julio.

Así mismo, en octubre de 2015, Guy impulsó una iniciativa para promover las discusiones multiactores e interdisciplinarias sobre alimentos, salud y medio ambiente a través de EATxCali, un evento que buscó reunir representantes de diferentes instituciones académicas y gubernamentales, así como agencias internacionales, empresas y la sociedad civil, para reconstruir los sistemas alimentarios y asegurar que los consumidores tengan acceso a alimentos más saludables y producidos de manera sostenible. Fue la primera vez en la historia del CIAT que un representante del Ministerio de Salud abría un evento de esta naturaleza. De hecho, la primera vez que alguien del Ministerio de Salud habría un evento en el CIAT.

Es curioso que la palabra precursor se refiere a aquel que abre camino para los que vienen detrás… mientras las antorchas, por su parte, se refieren, en sentido figurado, a aquello que sirve de norte y guía para el entendimiento… De manera que las antorchas encendidas son una herramienta clave para cualquier precursor. Visto así, se entiende por qué a Guy le fue dada esa voluntad de pedernal. Era necesaria. Lo fue en CIAT, lo fue en su matrimonio cuando casi se acabó, y lo fue para vencer el cáncer el año pasado.

Ahora Guy dirá adiós al CIAT e irá al CIRAD por un año más hasta completar el tiempo que le falta para su jubilación… bueno, para completar el tiempo que le falta antes de tomar 10 meses de vacaciones que tiene acumulados y, entonces, jubilarse. Después, fines de semana de 4 días, su casa en Providencia y temas de trabajo en los que su vida y la de Gloria se entretejan más profundamente, es todo lo que tiene planeado. Ya su hijo mayor está estudiando en Holanda y la menor pronto partirá con destino a Asia para recorrer caminos que la conectan con su padre, que empezó el recorrido académico a finales de los 70 en una universidad enfocada en formar profesionales para trabajar en las colonias holandesas, principalmente de Indonesia, a donde ahora ella irá para trabajar como voluntaria antes de estudiar en Rotterdam (Holanda).

Dos últimas chispas nos deja Guy antes de su partida. La primera, un almuerzo que él mismo organizó para 40 compañeros del CIAT (asistentes, asociados, técnicos, secretarias, vigilantes, meseras, jardineros, cocineros) a quienes quiere decir: “¡gracias por todo su apoyo, amistad, consejos, buena onda y saludos sinceros durante tantos años!”. La segunda, un panel de discusión sobre los avances logrados con el sistema alimentario sostenible para Cali, que tendrá lugar en el CIAT el próximo miércoles 27 de junio, de 10:30 a.m. a 12 m. Allí se abordarán temas como el proceso seguido en la construcción de la política pública municipal, el apoyo que brindará la plataforma de diálogo académico, los temas de trabajo que hay en la agenda, y qué se espera en el futuro. Para nosotros, será una gran oportunidad de ver brillar esta antorcha encendida. Para él, será un ambiente potencial donde hacer centellear otra vez su pedernal.

¡Gracias Guy!